lunes, 6 de septiembre de 2010

ETA el PP O EL PERRO DEL HORTELANO

La mañana me ha sorprendido con el enésimo anuncio de tregua por parte de ETA y me ha dejado en el cuerpo una sensación extraña. Una mezcla entre escepticismo, desconfianza y ganas de que cualquiera pueda andar por la calle sin que el fantasma de una 9mm parabellum le amenace la masa encefálica a una parte de la Celtiberia.
Los que vivimos a 2000 km de todo, tenemos la suerte de no respirar tan de cerca el olor a pólvora, goma 2, cemtex o cualquiera que sea el último invento para sembrar muerte, pero no por eso dejamos de pagar las consecuencias en muertos directos o indirectos. Lo cierto es que si alguien quiere dejar de matar, lo primero que debe hacer es fundir las armas y convertirlas en floreros, máxime cuando estamos hablando de una población, la vasca, donde los deseos de una mitad, no son compartidos por la otra mitad.
Es probable que durante la dictadura, ETA contara con simpatizantes incluso fuera del país vasco, pero una vez muerto el sujeto y restaurado el estado de derecho, cuando los muertos pertenecen a las filas demócratas y se llaman Blanco, Pagazaurtundúa, Mújica, Tomás y Valiente, Lluch, Centeno o Trapero, los apoyos dejan de existir, o si existen dejan de justificarse.
En cualquier caso, no es mi intención hacer un análisis sobre la tregua, sino sobre la actitud de los dirigentes del Partido Popular ante la situación, de la cual se deduce, que son ellos los menos interesados en que el problema se solucione, porque su triunfo se basa en alimentar el fracaso de cualquier gestión hecha por el gobierno de Zapatero
Díganme si no, a que vienen las declaraciones de la Oreja más grande del partido o sea la de Don Jaime Mayor cuando, coincidiendo con la espectacular escalada de acciones policiales contra ETA, se aprestó a enmierdar la situación, acusando al gobierno de negociar con la banda ¿O debo aceptar como válida la denominación de Frente de Liberación Nacional Vasco, utilizada por José María Aznar? ¿Tan tontos creen a los dirigentes del PP vasco?
Cuando lo lógico sería, al menos en justa correspondencia, que el partido en la oposición diera su apoyo incondicional al gobierno, el manumitido por Aznar, líder del PP, se dedica a amenazar y a chantajear abiertamente al Presidente con la ruptura del pacto PP-PSOE en Euskadi. Si, como dicen, tienen pruebas, ¿Por qué no han roto el pacto de gobierno?
Ahora, temerosos de que la tregua pueda ser verdad, se aprestan a reafirmarse en lo de las fantasmales negociaciones. O sea que si ETA, debilitada por el acoso constante, con mas miembros en la cárcel que fuera de ella, con la cúpula permanentemente descabezada y en una situación de debilidad sin parangón en su historia, (gracias don Alfredo), decide de forma unilateral una tregua, forzada en parte por las presiones de su entorno menos radical, es porque ha estado negociando con el gobierno ¿De verdad son tan tontos?
Lo que de verdad teme el PP, es , aunque va a ser que no, que exista una posibilidad de que el conflicto se acabe y si no se acaba, que amaine, porque eso los colocaría en el banquillo de los suplentes durante otra década
Creo que lo justo sería pedir a ETA que enfunde las pistolas para entregarlas y, al menos mientras esto no suceda, sería justo pedirles, a los dirigentes del PP, que enfunden sus lenguas.
De repente todo se reduce a que son muy malos perdedores

LA RECETA.-
Decía mi madre que la parte más sabrosa del pescado era la ventrecha, aunque su sabor, para la mayoría de la gente, resultara demasiado fuerte. En el caso del atún, además de buena es carísima, pero a veces podemos encontrarla enlatada y a un precio razonable.
Lo de hoy, más que un plato es una tapa o, para decirlo como los de p’a fuera, un montadito.
¿Recuerdan la famosa comida de cabrones: lata de atún, huevos duros, papas sancochadas y mayonesa? Pues lo que viene es lo mismo pero subido a una rodaja de pan.
Para el asunto hace falta:

Varios panes
2 latas de ventrecha de atún
1 latita de pimiento, mejor si es asado
Unas cuantas papas sancochadas
Aceite de oliva
Dos o tres huevos duros
Vinagre)
Perejil muy picadito
Mayonesa
Dos gotitas de Tabasco
Batir el pimiento con el aceite de oliva y un par de gotas de tabasco
Untar las rebanadas de pan con la mezcla. A continuación ponemos una o dos rodajas de papa bien finas. Encima de la papa una par de rodajitas de huevo con clara y yema. Ahora le toca el turno a un hilito de mayonesa sobre el huevo. Este es el momento del filetito de ventrecha y para acabarlo de rematar le ponemos unas gotitas de vinagre. Espolvoreamos con perejil muy picadito y a mover las mandíbulas. En justa correspondencia al nombre del plato, a esto podríamos llamarle, tapa de cabrones.
Si a usted, cuya inventiva le supongo, decidiera sustituir la encumbrada ventrecha por la humilde sardina o la obrera caballa, le garantizo que el resultado es igualmente apreciable. Plato de verano donde los haya