Mi despreciable monarca medieval:
Estoy hasta los mismísimos de que nos estés engañando. Primero tu abuelo, después tu padre y ahora tu han convertido la trampa en un arte. No se si es un mandato de Ala por el hecho de que, según el corán, somos infieles. El caso es que ya no te aguantamos más.
Mientras matas de hambre a tu pueblo, les preparas maniobras de distracción para que no se percaten de que los tienes amarrados por un pie y con la boca sellada a la fuerza. España no puede tratar contigo en igualdad de condiciones, pues mientras esto es una DEMOCRACIA, tu forma de gobierno no es homologable, porque eres el dueño de la vida y hacienda de tus súbditos o lo que es lo mismo impones una férrea DICTADURA. Matas a quien quieres y cuando quieres. Te apoderaste de un territorio que no te pertenecía echando por delante a 300000 ignorantes por si las minas estallaban.
Nos chantajeas constantemente con la inmigración ilegal y el terrorismo. Yo te acuso de ser el primer terrorista, puesto que practicas el terrorismo de estado. Cuando nos hablas del peligro que supone no hacerte el gusto, sabemos que lo haces porque todo lo que sucede en Marruecos está controlado por tu familia y amigos íntimos.
¿Algún ingenuo puede creerse que en tu país se cultive una sola planta de cannabis sin tu consentimiento?
Cuando tus esbirros nos amenazan con no controlar la inmigración y el tráfico de estupefacientes ¿Nos están diciendo que vas a incrementar el cultivo de cannabis y la fabricación de pateras?
La miseria en la que mantienes a tu pueblo, ha llenado nuestras calles de gente en busca de un porvenir mejor. ¿Que has hecho con todo el dinero que ha invertido Europa en tu país? ¿En que te lo has gastado? ¿Por que no lo has invertido en crear puestos de trabajo? ¿No sabes que esa es la mejor forma de acabar con las pateras?.
Eres un mal vecino, por eso debemos apoyar la creación de un estado libre en el Sahara que nos sirva de muro protector. Canarias no puede dormir tranquila teniéndote al lado, ni podemos ni debemos fiarnos de ti. Seguro que los saharauis estarán más agradecidos que tu, si nuestros empresarios los eligen para deslocalizar sus empresas.
Te has pasado por el forro unos acuerdos que firmaste con otros compromisarios.Has vendido a los americanos un fosfato que no es tuyo y a los japoneses un pescado que no te pertenece. Si el dinero que has invertido en anexionarte el Sahara, lo hubieras invertido en mejorar las condiciones de tu pueblo, hoy no tendrían que arriesgarse a morir en el estrecho o bajo las ruedas de un camión.
Tiene gracia tu exigencia de que te pidan perdón, cuando eres tu quien debería andar de rodillas pidiendo disculpas al pueblo saharaui y a tu propio pueblo.
Si fuera creyente rezaría para que tu pueblo se sacudiera el yugo que le has impuesto, pero como no lo soy, simplemente espero y deseo que te vaya muy mal. Mientras peor le vaya a Marruecos, mejor le irá a España y sobre todo a Canarias.
Como te dije al principio, estas cosas no te las pueden decir nuestros dirigentes. Ellos, diplomacia obliga, deben ser políticamente correctos, pero yo no he estudiado en escuela diplomática alguna, así que disculpa las formas. El fondo no me los disculpes, he escrito lo que deseaba escribir.
¡¡Al carajo contigo, Mohamed!!
Este artículo está dedicado a todos los saharauis que mantienen la esperanza de vivir en una patria libre.
En especial a Aminatu Haidar. ¡No les des el gusto de morirte!
La receta
Sardinas, del Sahara libre, empanadas.-
Ingredientes para 4 personas.-
1kg de Sardinas medianas o dos. Todo depende de las ganas de comer sardinas que se tengan. Conozco yo a una tropa que ni con cuatro Kg se arregla.
3 Dientes de ajo
2 Hojas de laurel.
1 Manojo de perejil
1 Vasito de vinagre blanco
2 Huevos
Harina
Pan rallado mezclado a partes iguales con almendra molida
Aceite de oliva
Limpia las sardinas y sácales la espina de forma que queden los dos filetes unidos por el lomo. Pon los filetes a adobar con el vinagre los ajos y el perejil bien picaditos. Cuando haya pasado una hora, pasar los filetes por harina, huevo y pan rallado. una vez que estén todos empanados, se fríen en abundante aceite bien caliente sin dejar que se pasen. El vinagre impedirá que se enchumben demasiado en aceite.
Se sirven con una buena ensalada de lechuga, berros y tomates maduros pero bien duritos.
Si de verdad quieres darte un homenaje en condiciones moja el asunto con una botellita de buen vino blanco.
Un fino bien frío no estaría mal. Doy fe de ello
